Mugardos y Montefaro

Montefaro está en lo alto de la peninsula de Bezuocos. Situada entre Ferrol y A Coruña.

Empezamos nuestra excursión en Mugardos, punto de partida de la carretera a Montefaro. ¹ 

Mugardos, Pueblo de pescadores con una larga historia, habitado desde la prehistoria, nos lo cuentan el la web del ayuntamiento.². Una vez que llegamos al puerto, girando a nuestra derecha, hacia el puerto. Las plazas de minusválidos están en el aparcamiento situado al terminar el paseo. Desde allí vemos cercano el puerto de Ferrol. En el primer tramo del paseo marítimo están varios restaurantes. Donde recomendamos degustar el plato típico, al que la villa le da el nombre, “pulpo a la mugardesa”³.

El Paseo tiene una parte del suelo de madera y otra en granito lisa, la silla rueda bien, la barandilla no tapa la visión y pocas zonas de peligro. Es muy agradable el olor del mar, el pararse a mirar los peces,los barcos de bajura y sus aparejos.

Batería de “a Bailadora” en Montefaro, surge ante la necesidad de protección del arsenal de Ferrol, se crea en perímetro de protección costero en el siglo XVII. ⁴

En Montefaro, ⁵ el aparcamiento es llano y espacioso. Forma un mirador natural, con una amplia vista a; la inmensidad del Atlántico, el puerto exterior de Ferrol como frontera entre mar y tierra, la estrecha entrada de la ría de Ferrol. Prestamos especial atención a las fortalezas, enfrentadas en punto mas estrecho de la ría.

El castillo de San Felipe ⁶ que desde este punto podemos ver la estructura interior de los muros del los castillos. El Castillo de la Palma ⁷ ahora cerrado esperando para ser convertido en Hotel. Mirando a la ría nos llama la atención la cantidad de grúas “cigüeñas” de los astilleros, que ahora resurgen. La ciudad de Ferrol parece mas grande, elevando la vista vemos una amplia comarca definida por verdes montes que la rodean.

Nos damos la vuelta hacia las infraestructuras militares, tras años de abandono, aun se encuentran en aceptable buen estado. Las construcciones apenas se elevan sobre el perfil del terreno, estando parte subterráneas. Tenemos que tener en cuenta que estaban construidas para no ser vistas. Hay que tener cierto cuidado ya que existen profundas trincheras sin protección y sin señalizar. Podemos recorrer con la silla de ruedas, tanto por los exteriores como acceder a algunas edificaciones. Las bases de los cañones todavía conservan los tornillos de sujeción. Desde la parte superior de las edificaciones tenemos una hermosa panorámica de la costa. 

Hay cerca otras baterias, aunque mejor acercarnos en coche, las pistas son de tierra y tienen pendientes y roderas que complican llevar la silla de ruedas. Cambiamos de ladera y tenemos una amplia vista de la ría de Coruña. Podemos ver Sada, las bateas de Lorbe hasta la ciudad de Coruña, pasando por la costa de Oleiros. A nosotros las condiciones climatológicas no nos permitió divisar con claridad el paisaje. Sin duda unos prismáticos nos serán útiles.

Podemos abandonar el lugar hacía Cervas y Ares, hay un pequeño tramo de tierra pero con pocos baches, que despacio se puede hacer sin problema para los pasajeros en silla de ruedas. 

Para quien quiera disfrutar de amplios paisajes bañados por el mar es un lugar donde sentarse y relajarse.